sábado, 16 de mayo de 2009
¿envidia, vos decís?
Cada vez que no queres volver a tu casa venis a mi y me decis me pedis si podés venir conmigo volver aquí conmigo que no queres estar ahí otra vez. Pero eso te agarra de noche, porque de día te la pasás con él y estás feliz, y llegas a mi casa y todo se te nubla y empieza a llover, mojas mis sábanas mi cama mi colchón, mojás el piso y el sillón. Pero cuando estás con él, la cama está seca, y más aún: arde en llamas. Y te pregunto para qué venis, por qué no te quedás ahí, a comer, a dormir a vivir, si estás feliz, para qué forzar todo, si estás feliz, ahí, estás feliz, y vas a venir, a volver a angustiarte, si ya no sirve esto, yo me pregunto (y te pregunto) ¿para qué venis? por qué no te quedás ahí, a comer, a dormir, a vivir. [si sos feliz]
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario